La magia de la Coherencia Cardiaca

Nuestro corazón contiene el campo electromagnético más potente de nuestro cuerpo, mucho más que el del cerebro. Es sabido en la comunidad científica que nuestro corazón contiene sus propias neuronas y que cuando entra en coherencia con nuestro cerebro este funciona de manera armónica y nuestras emociones y sistema nervioso fluyen. A través de diversas técnicas podemos lograr que nuestro corazón entre en coherencia cardiaca; una de ellas y que me encanta practicar es la de respirar lentamente poniendo nuestra atención en la zona de nuestro corazón, cerramos los ojos e imaginamos algo por lo que estemos agradecidos, o una imagen de alguien a quien queramos, un animal o lugar que nos guste mucho. Esto durante 5 minutos hace que nuestro corazón cree una coherencia y el campo electromagnético que emite entre en regulación. Automáticamente liberamos también con ello una serie de hormonas que actúan en nuestro beneficio como la oxitocina a la que denominan la hormona del amor, puesto que es la que está más presente cuando hay sentimientos de vínculo seguro, amor o gratitud. Pero no solo esto afecta positivamente a las hormonas que segrega el cerebro, si no que todo nuestro cuerpo y su campo electromagnético se ve inundado de una sensación de bienestar y calma. 

Cuando estamos haciendo un camino de transformación a través de la neuroplasticidad es importante tener en cuenta que nuestro corazón en nuestro aliado, ya que puede hacer que el cerebro entre también en un estado de coherencia que hace que muchas funciones del cuerpo se reparen, o incluso ayudar a nuestro sistema nervioso autónomo a salir de la respuesta de estrés crónico. 

Aquí os dejo un enlace al instituto español de Coherencia Psico-Fisiológica  https://institutodecoherencia.com/